Van Por José Murat Casab

Movido por el entonces gobernador José Murat Casab, el Congreso de Oaxaca interpuso en 2002 controversia constitucional ante la Suprema Corte para vedar a la Auditoría Superior de la Federación auditar fondos federales en 25 municipios, incluidos los del Ramo 33 para combatir la pobreza.Idénticos obstáculos enfrentó la ASF en 2003 y 2004. Pero el 8 de agosto de 2006 la Corte reconoció por unanimidad la facultad de la ASF para ello, y así se le cayó el teatrito a José Nelson Murat para encubrir qué hizo con 90 mil millones durante su sexenio.Ningún otro estado del país ha puesto tanta traba al respecto, y todo indica que el manejo de esa millonada se liga al conflicto detonado por la Sección 22 del magisterio y la APPO, y Murat teme que los resultados de las auditorías de la ASF, por denuncias que también recibió la Secretaría de la Función Pública, lo pongan en la picota y no quede inmune, pese a su fuero de diputado federal.Hubo la complicidad incluso de funcionarios federales: Miguel Angel Cuéllar, inhabilitado por el gobierno federal para ocupar cargos públicos y multado con cinco millones por malversar fondos como delegado de Sedesol fue contratado por Murat para manejar idénticos recursos como director del Programa Estatal de Unidades Móviles, no obstante su inhabilitación.Mas el 6 de mayo pasado se accidentó en la carretera Oaxaca-México a la altura municipio de Etla; sus restos y de su chofer quedaron dispersos en una milpa, y la policía local se enfrentó con los periodistas que fueron a cubrir la doble muerte y despojó de rollos y equipo a los fotógrafos. No hubo mayor información y el MP impuso silencio.No precisa mucha suspicacia para ligar todo esto a la crisis desatada por la Sección 22 y la APPO de Enrique Rueda y Flavio Sosa que hundió a Oaxaca siete meses en un caos con saldo de crímenes, incendios, secuestros de personas y propiedades y robos, patrocinada al inicio por Murat contra su sucesor Ulises Ruiz para afianzar su cacicazgo, y luego traspasó a López Obrador, que la empleó para reforzar su subversión e intentar impedir la toma de posesión del presidente Felipe Calderón.Se recordará que cada año en torno al 15 de mayo azotan al Distrito Federal con marchas y plantones hordas de la Coordinadora Nacional del Magisterio, lideradas por la Sección 22 de Oaxaca, que manejaban los gobernadores, desde Heladio Ramírez (con el líder Aristarco Aquino). Murat amplió los sobornos a más grupos civiles como el de Flavio Sosa, que reforzó con ex convictos a quienes liberó.Al llegar Ulises Ruiz al gobierno encontró que tales núcleos recibían 450 millones anuales. Al decidir suprimirlos, la 22 y la APPO armaron la gresca, azuzados por Murat, que siguió sobornándolos para perjudicar a su sucesor, sin importar las consecuencias, ni que más del millón de niños quedaran sin escuela en el estado con el más bajo índice educativo del país.En la indagatoria de la danza millonaria en el gobierno de Murat, hay pruebas como duplicidad de facturas. Una de la empresa Rodi Raban ampara la compra de 60 toneladas de cemento por 90 mil pesos, y hay otra con idéntico folio por 9,000 pesos y seis toneladas, con una diferencia de 81 mil pesos respecto de la anterior.Otra de Ferroeléctrica Gurrión, S.A. (del Grupo Gorrión, favorito de Murat para contratos de obras públicas) por la compra de 800 sacos de cemento por 57,997 pesos y una más con el mismo folio, por 14,500 pesos, importe de 200 sacos de cemento. Hay una diferencia de 43,447 pesos, que es de suponer fueron devueltos al funcionario que autorizó.En los operadores de Murat investigados está Aurora López Acevedo su secretaria de Transporte. Manejó fuertes recursos y al menos cuatro mil permisos de taxis, que a 30 mil pesos redituaron 120 millones; no rindió cuentas de ellos ni de los taxis piratas que autorizó. Anda prófuga.Carlos González Gardeazábal, propietario de la empresa Covico, a la que el gobierno de Murat otorgó un contrato para surtir a los maestros de la Sección 22 de electrodomésticos y línea blanca, que le significaba ventas por 800 millones al año.Indagan a Juan Díaz Pimentel por presuntos desvíos millonarios. Su amistad con Murat Casab no le bastó para sucederlo como gobernador.Otro bajo la lupa, Flavio Baytis, ex secretario de Finanzas, se encargó de financiar a la APPO, la Sección 22 y organizaciones similares. Con Díaz Pimentel obligaba a los alcaldes a contratar -so pena de perder los dineros del Ramo 33 y otros- a constructoras en las que Murat, Kaim su hermano y otros funcionarios, como ellos, tenían intereses.El 19 de agosto habrá en Oaxaca elecciones de diputados locales y el 14 de octubre para ayuntamientos, y ellos y otros ex funcionarios buscan arreglos para que el PRD los lance de candidatos y obtener así fuero.Por sus nexos con López Obrador los auxilia el mismo Murat, que amparado en su diputación federal saca buena raja del turismo legislativo y en seis meses ha viajado ya a Ghana, Chicago, Madrid, Barcelona, París e India, mientras en el PRI ni caso le hacen porque saben muy bien de su traición.Es de esperar que la ASF publicite pronto resultados de su trabajo y evite que los cómplices de José Nelson Murat Casab se escuden en un cargo de elección, que les brinde fuero.